Haciendo click sobre la imagen se puede descargar una diapositiva en la cual se puede ver una etiqueta con el nombre de cada práctica al poner el cursor sobre ella.
Estas prácticas se incluyen en TUNE-UP Process, nuestro enfoque y herramienta para implantación de agilismo en equipos de trabajo. TUNE-UP Process apuesta por combinar prácticas cogidas desde diferentes métodos ágiles (en lugar de intentar implantar un método ágil específico), y además, promueve una evolución metodológica en lugar de una revolución (ver post ¿revolución o evolución hacia la agilidad?). Por otra parte, hemos desarrollado AGILEV Roadmap, un sitio donde se puede elaborar de forma gratuita una hoja de ruta asociada a la implantación de prácticas ágiles, dicho sitio está basado en las prácticas presentadas en este post, y siguiendo el procedimiento descrito en Agile Roadmap: el primer paso para la implantación de prácticas ágiles.
Haciendo clic en la siguiente imagen podéis acceder a un mindmap donde se muestran las prácticas. Al costado derecho de cada práctica hay un enlace para acceder a una explicación.
Contar con una lista de prácticas puede verse como tener la carta de un restaurante y someterse a elegir los que comeremos y en qué orden. Así pues, según los intereses del equipo habría que establecer un conjunto de prácticas (un Improvement Backlog), que se comenzarían a implantar siguiendo un orden pre-establecido. Se debería: realizar un diagnóstico del estado metodológico del equipo, establecer objetivos de mejora, evaluar prácticas respecto de dichos objetivos, y estudiar los desafíos que pueda presentar la aplicación de cada práctica candidata, todo lo cual daría como resultado dicho Improvement Backlog, una lista ordenada de prácticas interesantes para aplicar en el contexto de trabajo de un equipo. Y eso no es todo, cada práctica requerirá una preparación y posible adaptación antes de ser aplicada, muchas de las prácticas también deben considerar apoyo de herramientas.
Las prácticas NO son independientes entre sí. Existen algunas dependencias evidentes, por ejemplo, aplicar refactoring sin tener un buen soporte de pruebas (y ojalá pruebas automatizadas) puede llegar a ser catastrófico :-). Sin embargo, hay muchas otras relaciones de dependencia que conllevan mayor interpretación, me refiero a cuando una práctica favorece en cierta medida la aplicación de otra práctica. Esto ya lo reconocía Kent Beck en Extreme Programming al señalar que mientras más prácticas se apliquen y en mayor profundidad, mejor será el resultado obtenido, pues se produce sinergia entre las prácticas aplicadas.
La implantación de prácticas no es fácil ni inmediata, y es en sí misma un proyecto de mejora continua. En este sentido tiene similitudes con cualquier tipo de proyecto de mejora de procesos, aunque la diferencia remarcable debe ser sin duda que este proyecto de mejora debe y puede hacerse también de forma ágil :-).
Patricio Letelier
No hay comentarios:
Publicar un comentario